domingo, 20 de enero de 2013

Capítulo 61.

[SIGUE NARRANDO APRL]


La poca luz que entraba por la ventana del balcón provocó que me despertara. Las consecuencias de haberme divertido anoche era el mareo y el gran dolor de cabeza con el que me había levantado esa mañana. Me masajeé la frente creyendo que quizás así disminuiría el dolor.
- ¡Buenos días, mi amor! - Dijo Harry aún con los ojos cerrados.
- Dirás malos...
- ¿Qué pasó? - Abrió de repente sus ojos.
- Me encuentro mal.
- Se llama resaca, cariño.- Rió él.
- Hablo en serio, idiota.- Sonreí.- No debí haber bebido tanto anoche.
- Bueno, ahora me levanto y te hago té para desayunar, ¿vale? - Me dio un beso.
- Está bien, te espero en la cocina.- Dije poniéndome las chanclas y yendo al baño.
Al mirarme al espejo grité. Estaba horrorosa. Me acerqué más para verme mejor. Sí, realmente daba miedo. Tenía pelos de loca y el maquillaje de los ojos todo borroso. Parecía un mapache. Junté las dos manos y me las acerqué a la boca. Eché el aliento. ¡Qué mal olía!. Y Harry hacía unos minutos me acaba de besar. Que asco daba esa mañana. Me di una ducha rápida frotándome bien la cara para que saliera todo el maquillaje y me lavé los dientes. Con lo agotada que estaba me daba pereza secarme el pelo, así que ya que había confianza con los chicos me lo dejé mojado aunque lo escurrí un poco con la toalla. Tampoco quería coger frío.
Me dirigí a la cocina esperando encontrar a Harry allí. A cada paso que daba, reposaba unos cuantos segundos porque la vista se me nublaba y me volvía el mareo. Distinguí a un chico de espalda con una taza en la mano. Me acerqué a él y le abracé por detrás dándole un beso en el hombre descubierto.
- ¿April? - Preguntó girándose.
- ¿Zayn? - Dije apartándome y notando como me enrojecía.- Lo siento, creí que eras Harry...
- ¿Cuánto has bebido ayer? - Pregunto riéndose.
- Lo siento de verdad. - Dije echándome el pelo sobre la cara.- Es que no te veía bien y te confundí con mi nov...
- Tranquila.- Me interrumpió.- Solo me has abrazado, no pasa nada.- Él seguía mirándome y sonriendo.
- Sí, tienes razón, no ha sido nada.- Dije en voz alta para convencerme a mi misma.
- Te haré un té, te sentará bien.
- No, deja.
- ¿Tan desagradable soy que no quieres desayunar conmigo?
- No seas tonto.
- ¿Pues? - Preguntó él.- Está bien, ¿me enseñas a hacer tu exquisito chocolate?- Añadió al ver que no le había respondido a la primera pregunta.
- Emmm...no debería revelar mi secreto pero haré una excepción.- Sonreí.
Cogí dos tazas del estante, leche y una tableta de chocolate. Comencé a calentar la leche esperando a que se hirviera. Zayn miraba atento a cada cosa que hacía.
- Me gustaría ayudarte.- Me pidió.
- Claro. Coge la tableta y divídela en cuadrados pequeños.- Él lo hizo.
- ¿Así? - Preguntó inseguro y metiéndose un trozo de chocolate en la boca.
- Muy bien. - Le aplaudí.- Pero Zayn...
- Dime.- Dijo dejando de masticar por miedo a haber hecho algo mal.
- No te comas el chocolate, es fundamental.- Reí yo.
- Pero si está riquísimo, mira.- Cogió un trozo y lo acercó a mi boca.- Pruébalo.
No sabía que hacer. Nerviosa entreabrí la boca y  posó el pequeño cuadrado sobre mi lengua.
- Sí, está muy rico.- Dije saboreándolo.- Bueno sigamos.- Dije volviendo al tema.- Una vez que el chocolate está derretido uno de mis trucos es echarle un poco de vainilla. Después le echamos la leche y una vez que ambos estén mezclaros...
- ¿Qué? - Preguntó ansioso.
- Espera aquí.- Sonreí yendo a mi bolso para buscar mi truco final.
- April, ven! - Me reclamaba Zayn.
- No seas impaciente.- Le regañé.- Ahora ponemos estos bombones al final de nuestras tazas y echamos el chocolate por encima. Añadimos azucar y.... TA-CHÁN!
Zayn sonriente cogió una taza y lo probó.
- Tan excelente como la primera vez que lo tomé. -Me halagó.- Muy bien.
- Gracias, gracias.
- Déjame adivinar, los bombones tienen sabor a... ¿avellanas?
- Eso es.- Dije orgullosa de mi aprendiz.- Aprendes rápido.
- Soy muy listo, ¿lo dudabas, April? - Dijo haciéndose el interesante.
- Por supuesto que no, ¿a qué energúmeno se le ocurriría dudar de la inteligencia de Zayn Malik?
- ¿Me parece a mi o te estás metiendo conmigo? - Preguntó acercándose a mi con una sonrisa maliciosa.
- Zayn te imaginas cosas muy extrañas eh.- En ese momento comenzó a hacerme cosquillas y no podía para de reír hasta que apareció Harry y Zayn se detuvo.
- Hola, cariño.- Dijo dándome un beso y yendo hacia la nevera.
La aparición de mi novio me había puesto muy nerviosa. Pero, ¿por qué? En realidad no estaba haciendo nada malo. Sólo éramos dos amigos que hacían chocolate.
- ¿Interrumpo algo?- Preguntó Harry.
- ¿Qué? ¿Eh? No.- Dije rápido.
Miré a Zayn, le había cambiado la cara y no respondió.
- Está bien...- Dijo poniéndose por detrás mio, abrazándome.- Siento no haberme levantado para hacerte el té es que me volví a quedar dormido.
- No pasa nada, ya he desayunado.- Miré hacia atrás para darle un beso.
- ¿Qué pasa, tío? Estás muy callado.- Le dijo mi novio a su amigo.- Ah, ya se lo que te pasa. Estás nervioso.
- ¿Eh? - Preguntó Zayn mirando su taza con chocolate.
- En una semana es tu cumpleaños. Ya veinte años, que viejo.- Rió.
- Cállate que tu cumples los 19 y en un año ya tendrás 20.- Dijo Zayn un poco más sonriente.
- Pero yo los llevo mejor.- Respondió Harry cogiéndome de la mano y llevándome al salón.
Me sentó sobre él y me miró sonriente pero aún con cara de dormido.
- ¿En que piensas si te digo Virgen Gorda? - Me preguntó quedándose unos segundos pensativo.- No respondas, la verdad no suena nada bien. - Rió.
Le miré confundida. ¿Virgen Gorda? O me acababa de llamar virgen y gorda o realmente se refería a otra cosa.
- Son unas islas.- Obviamente fue la segunda opción.- En América.
Intentaba llegar a la conclusión de por qué mi novio me hablaba de unas islas.
- ¿Y bien?
- ¿Y bien qué? - No sabía a que se refería.
- ¿Quieres que vayamos dentro de dos fines de semana?
- ¿Que si quiero ir a unas islas con mi fantástico novio a pasar un fin de semana? - Sonreí al decirlo.- Claro, eso no se pregunta.
- Menos mal.- Sonrió aliviado.- Porque ya he comprado los tickets para el barco.
- Tendré que hablar con mi madre para convencerla... dentro de dos días empiezo el instituto otra vez y buf...- Sólo de pensar los impedimentos que mi madre me iba a imponer se me quitaban hasta las ganas de preguntarle nada.
- Tranquila, de eso me encargo yo.- Dijo con aire misterioso.
- Cariño, no te ofendas pero no creo que a mis padres les tranquilicé saber que voy contigo teniendo en cuenta de que soy su niña pequeña...
- Déjamelo a mí- Dijo confiado y dándome un beso.- Además, ¿quién ha dicho que se lo diré sólo?
- ¿Qué? - Pregunté sin entender nada.- ¿A qué te refieres? - Pero él se limitó a sonreír y a irse con Louis a desayunar.

Fui a la habitación y recogí la ropa. Al parecer Eleanor me había traído prendas de repuesto. Realmente había hecho un gran trabajo con la fiesta que había dado a noche. Pensó en cada detalle y lo llevó a cabo. Es una chica muy organizada que además sabe como divertirse. Me sonó el móvil. Otro mensaje.

"¿Aún no descubriste quién es Abi? Pobre estúpida" - E

La verdad es que entre fin de año y toda la fiesta se me había olvidado que desde la mañana de navidad no me habían parado de llegar mensajes anónimos con un número oculto. Todos ellos hablaban de Abi. Creo que se refería a la chica que conocí la misma noche del 24 de diciembre, cuando Harry cuidó de Lizzy.

"Deberías preguntarle a tu novio." - E

¿Qué tenía que ver Harry en todo esto? Me estaba poniendo muy nerviosa. No le había comentado a nadie todo esto de los mensajitos ocultos. Seguro que alguien quiere meterse conmigo o provocar que desconfié de Harry. No lo van a conseguir. No le daré importancia.


[DOS DÍAS MÁS TARDE]

- Espero que estéis todos preparados para este segundo trimestre, ya sabéis que en una semana empezaran los exámenes. Éste quizás sea el mes que se os pase más lento pero seguid estudiando. - Dijo nuestra tutora en cuanto llegamos a clase.- Ya queda menos.- Suspiró.
- Acabamos de venir de las vacaciones de navidad y lo primero que hace es recordarnos que la semana que viene ya tenemos exámenes.- Me habló George por lo bajo.
- Ya ves, parece que su trabajo es amargarnos en vez de enseñar.- Él y yo nos reímos ante mi comentario.
- ¿Ya empezamos Señorito Shelley y Señorita Ross? Una palabra más y os separo.
George me miró poniendo los ojos en blanco como diciendo que la Señorita Lemark no tenía remedio.
Después de unas cuantas horas clases y de varios intentos por no quedarme dormida en ninguna, tocó el timbre.
- Hey April, ¿vienes? - Me dijo George que estaba con Lizzy y ¿esa era Abi?. ¿Qué hace en mi instituto?
- No, no.- Le sonreí.
- No seas tímida.- Me cogió por el hombro llevándome junto ellos.
- Hola Lizzy.- Le di un beso.- ¿Y tú eras...?- Dije haciéndome la loca, mirando hacia Abi.
- Abi, ¿no te acuerdas de mi?- Preguntó sorprendida como si se tratara de una estrella de cine, al que todo el mundo reconoce.
- No, lo siento.- Mentí. Mi subconsciente comenzó a reírse a carcajadas, "bien hecho, April Ross". Me dije a mi misma.- Pero es un placer.- Le di la mano.
Pasé todo el recreo con ellos. Me fijé, más de una vez, en todas las miraditas que se echaron Lizzy y George. No dije nada, no voy a sacar conclusiones precipitadas ni a incomodarles. Pero me daba la impresión de que después del beso que se habían dado, algo entre ellos dos, había surgido.
- Bueno, nos vemos el viernes.- Se despidió Abi.
- ¿Cómo que el viernes? - Dije con mala cara.
- Sí, iremos al cumpleaños de Zayn.- Me explicó Lizzy.
- Hasta el viernes, chicas.- Sonrió George.- Y ahora que estamos solos, ¿no te cae bien Abi?
- ¿Qué? - Pregunté ya que no le había atendido a lo que me acababa de decir.
- Estuviste muy callada todo el recreo, y tu hablas mucho, April.
- Ah no, no es nada.- Me había dicho a mi misma que no hablaría de los mensajes de texto que me llegaban al móvil, y así seguiría.
- Como quieras.- Respondió mi amigo, llevándome de vuelta a clase.

Me había pasado toda la semana estudiando para preparar los exámenes. Por suerte no había recibido ningún mensaje más. Quizás esa tal "E" ya se había hartado de mandarme mensajes y ver que no tenían ninguna repercusión sobre mi. Aunque claro eso era porque esa persona no tenía ni idea de todas las vueltas que yo le daba a la cabeza.
El viernes por la tarde Eleanor me llamó por teléfono y me insistió hasta que le dije que sí  para ir a comprar lencería provocativa para dejar a Harry boquiabierto durante nuestro pequeño viaje de fin de semana.
Esa noche Harry se pasó por casa para comentarle a mis padres lo de las islas Virgen Gorda. No lo había visto en toda la semana por lo ocupada que había estado estudiando. Para mi sorpresa, cuando llegó venía muy bien acompañado.

[NARRA HARRY]

- Hola, abuela.- April la abrazó .
- Hola mi koala.- La saludó ella.
- Hola, cariño.-Le di  un beso en la mejilla.
- ¿Así que este era tu plan secreto? - Me susurró.
- Creo que subestimas a tu abuela.- Sonreí yo..
Después de una cena agradable, fue la  abuela de April la que comenzó a hablar de las Islas. Disimuladamente iba profundizando en el tema.
- Entonces, Adam deberías dejar a April ir un fin de semana allí.- Dijo Monique a su hijo.
- ¿Mi opinión no cuenta? - Preguntó Katherine un poco molesta.
- Claro que sí querida.- Habló su suegra.- Pero antes de que digas nada, déjame recordarte lo enamorada que estaba tú de mi Adam. Eras muy joven y os hemos permitido muchas cosas...- Monique llevaba el control de la conversación. Ella mandaba. Y yo aguantaba para no reírme. Acababa de dejar a los padres de April sin habla. Está mujer era sin duda, increíble.- Harry y April también son jovenes y  así la niña vendrá más relajada.
- Está bien.- Dijo la madre de April.
- ¿Qué?- Preguntó Adam sorprendido por la autorización de su mujer.
- ¿Recuerdas aquel viaje que hicimos nosotros con veinte años?- Sonrió Katherine cogiendo la mano de su marido.- Además April está cumpliendo con su deber, que es estudiar. Mientras siga así...
- Tienes razón.- Respondió su padre.- Tan enamorados como ahora...- Se miraron ambos a los ojos. Fue una situación muy romántica.
- ¿Eso significa que iré o que seguís tan enamorados como el primer día? - Preguntó mi novia impaciente y yo escondí una enorme sonrisa por su pregunta.
- Sí, puedes ir.- Dijo Adam.
- Gracias Señor y Señora Ross.- Agradecí, y miré directamente hacia Monique que me estaba guiñando un ojo.
- Bueno si nos disculpáis a Harry y a mi, vamos a prepararnos para el cumpleaños de Zayn de esta noche.- Dijo April cogiéndome de la mano y tirando de mi.
- Claro, que la paséis bien.- Contestó su abuela.

[NARRA APRIL]


- ¿Te acuerdas que habíamos quedado en que yo te daría la máscara que llevaras hoy?- Dijo Harry poniéndose el traje y la camisa.
- Así es.- Respondí mientras me hacía un medio recogido. Decidí hacerme una trenza con la mitad del pelo y la otra mitad suelto.
- Pues aquí está.- Se acercó a mi con la camisa desabrochada y una pequeña caja en sus manos.

- Es preciosa.- Dije cuando pude articular alguna palabra.
- ¿Te gusta?
- Me encanta.- Le besé.- Pero, ¿cómo sabías cual era el color de mi vestido?
- Tengo mis contactos.- Sonrió mientras se abrochaba los botones.
 Me puse el vestido y me subí la cremallera.
- Me lo dijo Eleanor.- Sonrió desvelando su contacto.- ¡Dios, no se que me pasa hoy que no puedo atarme la corbata! - Se quejó mientras forcejeaba con el nudo frente al espejo de mi cuarto.
- Déjame ayudarte.
- No, puedo sólo.- Dijo testarudo.
- Ven anda, que ya deberíamos haber salido.- ÉL se giró para ponerse frente a mi y así acabar de acomodarle la corbata.- ¡Vaya, April!
- ¿Qué pasa?- Dije ajustándosela al cuello.
- Estás impresionante.- Me cogió una mano y me hizo girar sobre mis tacones para dar una vuelta.- Muy buena elección Señorita Ross.- Sonrió besándome.
Zayn había decidido hacer una gran fiesta. Pero no cualquier tipo de fiesta. Una fiesta de máscaras. Me había decantado por un largo vestido sin asas y de color azul muy claro.

º

Harry se puso su antifaz negro liso. No tenía ningún detalle pero estaba realmente sexy.
- Te queda perfecto teniendo en cuenta lo misterioso que estás últimamente.
- Gracias.- Sonrió pícaro, colocándose detrás de mi para atarme la mi máscara.- Estás radiante, April.
Él si que estaba radiante. Lo único que veía de su cara era su preciosa boca y esos ojos verdes irresistibles. Mi corazón comenzó a latir desbocadamente cuando Harry me sonrió.
- ¿Lista?
- Sí.- Le di un pequeño beso en los labios y nos metimos en el coche, directos a la velada que nos esperaba.








lunes, 7 de enero de 2013

Capítulo 60.

[SIGUE NARRANDO APRIL]


Una vez más estaba subida a un avión pero esta vez acompañada de Harry.
- Siento que no puedas estar a medianoche con Pam...- Dijo él.
- ¿Eres tonto?- Reí yo.- Estamos de camino a Nueva York para celebrar el año nuevo. Estoy feliz.- Dije emocionada.
Él sabía que éste año contaba con pasar fin de año con Pam. Iba a ser nuestro primer fin de año juntas pero, sinceramente, me hacía mucha más ilusión pasarla con él, y nada menos que en New York City. Además sólo íbamos a estar allí hasta las doce, después volveríamos a Inglaterra para la fiesta que Louis y Eleanor habían organizado.
- ¿Has estado alguna vez en Central Park?- Me preguntó Harry.
- Nunca.
- Te encantará.- Sonrió
- ¿Estaremos solos? - Pregunté preocupada.
- Tendremos cuatro guardaespaldas, aunque intentaré que nos dejen tener la máxima intimidad posible.
- ¿Hacía falta tantos?- Reí yo.
- Nueva York es una ciudad muy grande y en estas fechas hay mucha más gente que normalmente, prefiero ser precavido.
- Gracias.- Le besé en la mejilla.
- ¿Gracias, por qué?
- Por ser precavido, supongo.- Él sonrió.

[NARRA PAM]

- Tranquila El, seguro que vas a estar guapísima.
- No sé yo Pam...- Me contestó Eleanor.
- A ver, enséñame el vestido y te digo mi opinión.
- Pero dime la verdad, ¿vale?
- Sí.
Apareció con un vestido muy de su estilo. Color rosa palo que le quedaba francamente bien.
- ¿Y bien?- Preguntó.
- ¡Te queda de muerte! Sin duda ponte ese.
- Menos mal.- Sonrió aliviada.- Espero que la fiesta salga bien.
- Seguro que sí.
- ¿Quieres que te ayude con tu modelito?
- En realidad, ya sé que voy a ponerme.
- ¿Si?
- ¿Quieres verlo?- Le pregunté.
- Ya estás tardando.- Me empujó al baño para que me vistiera.
- Tan sólo es el vestido eh, no voy a maquillarme aún.
- Vale, sal y déjeme verte.
- Es un color muy parecido al de tu vestido.- Dije aún desde el baño.
- Sal ya Pammy!- Me ordenó riendo.
- ME ENCANTA EL VESTIDO, TE QUEDA GENIAL.- Dijo con un tono elevado y agudo en su voz.
- Gracias, gracias.- Le sonreí.
- A Niall le encantará.
- ¿Tu crees?
- Lo tengo muy claro. - Me sonrió ahora ella a mi.- Bueno, ¿estás lista para ir a la peluquería?
- Sí. Hace falta que alguien dome mi pelo.- Reí yo.
- Danielle ya no está esperando allí.
- Perfecto.


[NARRA APRIL]


- Tengo una pequeña sorpresa para ti.- Dijo Harry en cuanto llegamos al aeropuerto.
- ¿Otra más?
Intentaba imaginar cualquier sorpresa viniendo de él pero no se me ocurría nada. Pero la verdad la intriga me gustaba y, al mismo tiempo, me ponía nerviosa.
- Mira la entrada.- Susurró detrás de mi.
- ¿En serio?- Comencé a sonreír yo.
- Sí.

Era como un carruaje. Harry me agarró la mano y me ayudó a subir. Me senté en aquellos asientos tapizados con una tela suave de color rojo. Él se sentó a mi lado y le dijo al "choffer"  una dirección.
- Es tan precioso.
- ¿El que?- Preguntó mi novio interesado.
- Nueva York. - Dije mientras miraba por la ventana y disfrutaba del paisaje.- La nieve, las personas con ropa de invierno, los edificios tan altos, el espíritu navideño que se respira y estar en esta especie de carruaje.- Sonreí.
- Me alegra que te guste.- Cogió mi mano.
- Me encanta.- Dije acariciando su mano.- ¿Por qué paramos?- Pregunté en cuanto os detuvimos.
- Sé que te gusta patinar...- Se le iba formando una sonrisa a medida que decía más palabras.- Así que he pensado que podríamos pasar aquí un rato, divirtiéndonos.
- Harry, madre mía, es genial. Eres el mejor.- Le besé contenta.
- Anda vamos, enana.- Sonrió.- Tendrás que ayudarme eh, que no soy muy bueno con esto de los patines.

Ya era de noche, quedaba una hora para las doce. Central Park era inmenso y realmente precioso. Harry me había llevado a una pista de patinaje. Con los patines en mis pies fui hacia el hielo y me deslicé. Hace muchos años que no me ponía unos patines pero no había olvidado como se hacía. Ví como Harry me miraba, quieto.

- Ven conmigo.- Le pedí, extendiendo una mano hacia él.
- Está bien.- Me la dio y yo tiré para acercarle a mi.- No tan rápido!
- No te soltaré, tranquilo.
- Más te vale no soltarme.- Rió él mientras yo movía una y otra vez mis piernas para coger algo de velocidad.
- ¿Qué pasa si te suelto?- Pregunté pícaramente.
- Ni se te ocurra.- Decía mi novio con una sonrisa en la cara.
Intenté soltarme pero él fue más rápido y hábil que yo. Cogió mi mano con fuerza y me apretó para que no pudiera escaparme.
- Te tengo calada, pequeña.- Rió Harry orgulloso.
- ¿Tan seguro estás? - Me dejé caer el suelo, y al tenernos cogidos de la mano, él cayó conmigo. Ambos empezamos a reírnos a carcajadas.

- Siento interrumpir pero el diez minutos serán las doce, deberían ir al centro.- Nos avisó un guardaespalda.
- Tienes razón. Gracias.- Le dijo Harry.
Nos quitamos rápidamente los patines y apurados fuimos en busca de un sitio. En el centro de la ciudad había una enorme pantalla donde ponía exactamente los minutos que quedaban para medianoche.
Las personas, a nuestro alrededor comenzaron a hacer la cuenta atrás. Yo estaba cogida del brazo de mi novio. Teníamos los cuatro guardas de seguridad a nuestros lados. Harry y yo mirábamos a la  gran pantalla que teníamos frente nuestra.
- 5, 4, 3, 2,...- Gritamos a la vez.
En el último segundo Harry  ya tenía sus ojos puestos en mi. Sabía que lo primero que haría sería ponerme delante de él para darle un beso. Y así fue. Mis labios se unieron a los suyos durante varios minutos.
- Feliz año, April.- Susurró a pocos centímetros de mi cara.
- Feliz año, Harry.- Le di un pequeño beso y lo abracé.

Él respondió a mi abrazó, rodeándome la cintura con sus brazos. Nos separamos un instante y vimos como caía confeti y papelitos de colores sobre nosotros y las millones de personas que estaban en Nueva York
- Espero que sean más año contigo.- Dije acercándome a su oído.
- Yo también lo espero, cariño.- Respondió dándome un pico y mucho besos cortos sobre mi mejilla.
Pasó su mano por detrás de mi cabeza y me volvió a abrazar, frotándome la espalda.
- Te amo.
- Yo también te amo, enana.

Otra vez vino junto a nosotros un guarda espalda recordándonos a Harry y a mi que deberíamos ir al hotel a cambiarnos y llegar a la fiesta de nuestros amigos.
- ¿A verte?- Me pidió Harry que llevaba esperándome unos quince minutos fuera del baño.
- Ya voy.- Terminé de arreglarme y salí. Me había puesto el vestido que él me había regalado por navidad, unas cuñas negras y brillo de labios rosa.



- ¿Qué? - Le pregunté a mi novio cuando se me quedó mirando prácticamente boca abierto.
- Estás muy guapa. - Sonrió él.- Fue un acierto comprarte ese vestido.

[NARRA PAM]


Niall y yo ya nos encontrábamos en el lugar de la fiesta. En realidad, todos estaban allí excepto Harry y April que estarían a punto de llegar. Louis y Eleanor recibían a todos en la entrada como buenos anfitriones.



El lugar era enorme. Y para sorpresa, Liam vino a avisarnos que todos nosotros dormiríamos allí.
- No entiendo.- Dije yo.
- Arriba hay habitaciones, Eleanor le ha avisado a Danielle que podemos quedarnos. Que lo alquilaron con cuartos apropósito.
- Que preparado está todo.- Contestó Niall.- Pero me parece una gran idea, ¿nos muestras nuestra habitación?
- Claro.- Dijo Liam acompañándonos.- Aquí es.
- Gracias, tío.- Fue la manera más sutil que tuvo Niall de despedir a Liam para que nos dejara intimidad.
- Estás guapísimo con traje.- Le halagué.
- Tú sí que estás guapa.- Dijo besándome.
- Niall...
- Dime.- Respondió mirándome con esos ojos azules.
- Siento haberte dado largas en este aspecto...Verás es que no estaba segura, tenía miedo.
- ¿Miedo? ¿De mi?- Preguntó con expresión seria.
- No, no de ti.-Intenté explicarme mejor.- Miedo a estar más enamorada y a no poder vivir sin ti.
- Pam yo ahora mismo no puedo vivir sin ti.
No pude evitar besarle. Un beso apasionado.
- Te quiero Niall James Horan.
- Y yo a ti Pam Evam y ten por seguro que siempre cuidaré de ti.
Me dejé llevar por él y sus encantos. Me besó en el cuello y me sacó poco a poco el vestido.
- No voy a presionarte con esto, ¿estás segura? - Me preguntó.
- Totalmente segura.- Dije cerrando los ojos y dejando fluir los sentimientos.


[NARRA APRIL]

- HOLA! - Grité yo al entrar a la fiesta.
- ¡ FELIZ AÑO A TODOS! - Gritó mi novio.
Pude ver a las familias de los chicos, a Lizzy, a Ed, a Nick y a muchos amigos más.
- Vaya, vaya, vaya... April Ross, al fin te conozco.- Dijo el famoso Nick Grimshaw.
- Lo mismo digo.- Contesté dándole la mano y un beso.
- Toma, A.- Harry me había traído una cerveza.
- Cariño, sabes que no me gusta la cerveza.
- Harold siempre metiendo la pata.- Rió Nick.
- Nunca la has probado, seguro que te gusta.- Habló mi novio.
- Está bien.- Dije dando un sorbo.- Bueno no está mal....nada mal.
- Cuidado April, quizás este capullo quiera emborracharte.- Bromeó Nick.
Harry y el comenzaron a darse puñetazos. Ambos se reían a carcajadas. A la "pelea" se unió Zayn y Liam.
- Menudos críos.- Rió Danielle acercándose a mi.- Todos mayores de edad y jugando a las peleítas.
- Ni que lo digas.- Reí yo.

- FELIZ AÑO!- Pam me abrazó.
- Feliz año Pammy! - La miré.- ¡Qué guapa estás!
- Gracias. Tengo que contarte.- Dijo con una sonrisa radiante.
- Emmm... mucha risita noto.- Respondí metiéndome con ella.
- Sólo te diré que empecé muy bien el año.- Me guiñó un ojo y volvió junto a su novio.
Pude imaginar a que se refería al ver su cara y su pelo. El moño que se había hecho estaba casi desarmado, hacia un lado y con mucho mechones sobre su cara.

- ¡Hola Lizzy! - La saludé al verla.
- Hola.- Dijo casi sin mirarme.
- Hey, ¿estás bien?
- Sí...
- Bueno me alegro de verte.- Dije buscando a mi novio.
- Oye April..- Me frenó.- Quería disculparme por lo ocurrido el día de navidad...
- No te preocupes.- Le sonreí.- Sé que habías bebido...
- Gracias por entenderlo.- Respondió acercándose para abrazarme.
- Eres un encanto Liz.- Le abracé muy a gusto.

- LOS PADRES YA SE HAN IDO.- Gritó Louis.
- ¿LISTOS PARA LA FIESTA?- Gritó Eleanor ahora.- EMPEZAREMOS CON LOS CONCURSOS.
- ¿Concursos?- Preguntamos Pam y yo a la vez.
- He aquí las novatas.- Rió Zayn.
- Chitón moreno.- Le contesté.
- Venid aquí.- Dijo Louis señalando la alfombra del centro del salón.- Hacer un círculo.- Liam, Niall, Zayn, Harry, George, Lizzy, Eleanor, Abi, Danielle, Pam, Louis y yo nos sentamos formando un redondel. Louis colocó una botella en el medio.- Bien, hacemos girar la botella y a las dos personas que le toquen deberán pasarse un hielo por alguna parte del cuerpo, ¿entendido?
- Sí.- Dijimos unos cuantos al unísono.
 Los primeros fueron Niall y Pam. Los cuales tras pasarse un hielo se dieron un gran beso delante de todos nosotros. Lizzy y George fueron los siguientes.
- Uy, uy, uy... Liz te estás poniendo roja.- Harry se metió con ella.
- Cállate Hazza.
Louis volvió a girar la botella
- Zayn con....- La botella dio una vuelta hasta pararse en mi.
- Ejem...- Dijo Harry.- Cuidadito con lo que haces Malik.
- Tranquilo Harold, es sólo un juego.- Habló Lou.
Ya que le había tocado a Zayn primero, debía ser él quien me pasara el hielo. Me quedé muy quieta. Zayn con el hielo en la boca, se acercó a mi y me lo pasó por el cuello. Al notar el frío me estremecí un poco.
Los siguientes fueron Abi y Harry. Yo no dije nada. Sólo me límite a mirar y a morirme de celos por dentro. Abi hizo lo mismo que Zayn pero en Harry. Pasó su hielo por el cuello de mi novio. Ese momento duró más de lo que me habría gustado o quizás, sólo fue sensación mía.
- Vaya, vaya...- Rieron Niall y Louis a la vez.
- La botella os quiere chicos.- Dijo Liam refiriéndose a Zayn y a mi ya que nos había vuelto a tocar.
- ¿Sabéis que? - Harry se acercó a mi y me besó, un beso largo y con lengua, frente a todos.- Que se acabó este juego.
- Está bien, está bien.- Dijo Eleanor, intentando levantarse pero iba un poco mal y Liam la ayudó.- Gracias, Batman.- Rió ella.

La verdad es que todos íbamos un poco contentos de más, excepto Niall, Pam, Liam y Danielle. Mi novio comenzó a bailar en medio de la pista. Pero entre lo torpe que era y lo que  había bebido se cayó.
- Auch! - Gritó como un niño pequeño.
- ¿Estás bien, cariño?- Me acerqué a él pero cogió mis dos piernas, perdí el equilibrio y caí sobre él.
- Ahora sí que estoy bien.- Me sonrió.
Liam y Danielle nos ayudaron a levantarnos ya que Harry y yo no dábamos una juntos.
- Mi novia es tan guapa...- Decía Harry.-  ¡Es que mírala, es perfecta!
- Tienes una cara de embobado que no veas Harold.- Se rió Pam.
- Es April, es preciosa. Tengo suerte de ser su novio. ¿ A qué somos una bonita pareja?.
- Vas bueno eh.- Reía Pam.- Sí, si que sois una bonita pareja.
Yo me había puesto a bailar con George y Zayn. Reía al oír comentarios de Harry, reía sin parar. En realidad si hubiera querido parar creo que ni podría haberlo hecho. Comenzó a sonar Kiss You, esa canción provocó que los que quedábamos nos pusiéramos a bailar.


Louis y Harry empezaron a hacerse fotos juntos.



Eleanor vino con más cerveza. Y mi novio propuso una competición. Louis contra Eleanor. Él contra mi. Los  demás nos rodearon y comenzaron a animarnos.
- LOUIS, LOUIS, LOUIS.- Gritaban los chicos.
- EL, EL, EL, EL, EL.- Gritábamos las chicas.
- ¿Quién es el mejor? ¿Quién es el mejor? - Dijo Louis ya que él había bebido más rápido el vaso.
Era mi turno y el de Harry.
- No me falles Harold.- Le chocó los cinco Louis.
- No lo haré. - Dijo este creciéndose
- BEBE, BEBE, BEBE, BEBE.- Gritaban todos a nuestro alrededor.
Yo bebía como nunca antes había bebido. Absorbía la mayor cantidad de cerveza posible. Eché hacia atrás la cabeza para tomar el último trago y caí. Todos se echaron a reír. Zayn se acercó a recogerme.
- JA! Te he ganado, pardillo.- Le dije a mi novio una vez estuve en pie.- No deberías subestimarme, pequeño.- Reí.
- Sí, tienes razón.- Vino hacia mi y me besó.- Toda la razón.
- ¿Qué te parece si desaparecemos un poco? - Dije yo mirando las escaleras que llevaban a las habitación.
Sin pensarlo dos veces me cogió de la mano y subió con prisa las escaleras hasta llegar al cuarto.
- ¿Qué tal te lo has pasado?- No sabía porque acaba de preguntarle eso, tan solo se me ocurrió y lo solté.
- Genial, ¿y tu?
Harry no me dejó contestar porque me interrumpió con un beso corto. Cogió una de mis piernas y la pasó por encima de él. Comenzamos a besarnos lentamente.
- Levántate.- Me pidió.
Me paré y lo atraje hacia mi. Me hecho contra la puerta del balcón. Y me sacó el vestido.
- Está fría.- Me quejé al notar la puerta de vidrio en mi espalda.
- No será para tanto.- Rió mi novio.
Le saqué su camiseta y le di la vuelta dejándolo a él contra la puerta.
- ¡AY! Si que está fría.
Nos pusimos contra una de las paredes. Él intentaba desabrocharse el cinturón y bajarse los pantalones, todo al mismo tiempo. Le ayudé a hacerlo. Empezó a besarme por todo el cuello.
- Sabes que si me besas el cuello...- Tomé aire.- No puedo...- Intenté decir cada vez más excitada.
- Lo sé- Sonreía él.
Los dos estábamos desnudos. Notar su cuerpo caliente contra el mio me aceleraba las pulsaciones. Volvimos a besarnos. Nuestras lenguas jugaban. Comencé a mover mi cadera hacia delante y hacia atrás.
- Para...- Dijo él cerrando los ojos.
No le hice caso, seguí moviéndome. Golpes rápidos y secos. Noté como al no hacerle caso, le provocaba. Puso sus manos en mis caderas y hacia fuerza para intentar pararme. Yo forcejeaba con sus manos para sacarlas de ahí y seguir excitándole ya que me encantaban sus reacciones.
- Eres mala.- Rió.
- Muy mala.- Le contestó con la voz entrecortada.
Cogió mis manos, las entrelazó a las suyas y las colocó sobre mi cabeza. Esa situación me encendió más aún de lo que estaba. Y a él también.  Se abalanzó sobre mi. Sus besos eran seductores y agitados. Me cogió a colo y me llevó hacia la cama. En cuanto me echó sobre él, gimió un poco.
- Despacio, ¿vale? - Le pedí.
- Tranquila.- Dijo besándome y nos dejamos llevar.




FELIZ AÑO A TODOS. Espero que en este año se cumplan todos los sueños que tengáis. Si 2012 fue un mal año, tranquilas, un año nuevo llegó. Y ya sabéis lo que dicen, "año nuevo, vida nueva". No hace falta exagerar, ¿no? Pero siempre estáis a tiempo de cambiar aquellas cosas que nos os gustan o al menos de intentarlo. Espero que me sigáis acompañando y apoyando un añito má,s ya sabéis que yo estaré aquí para lo que necesitéis.  Siento haber tardado, quería que el capítulo coincidiera con el estreno de Kiss You. ¿Es genial el video, a que sí?. Estaré encantada de leer en comentarios lo que os han regalado tanto Papá Noel como los Reyes, si queréis claro. HUGE LOVE.