-¿ Quién habla? - Preguntó ahora Jane.
- Hola, soy yo, April. ¿ Qué tal las cosas por Oxford? - Pregunté
- Oh es un milagro que me llames.- Dijo haciéndose la graciosa.- Pues muy bien, ¿y tú? ¿Desde dónde me llamas?
- De eso quería hablarte. A ver estoy pasando unas semanas con los chicos de One Direction, en el bungalow del padrastro de Harry.
- Madre mía, como cambian las cosas, hace unas semanas estabas deseando verlos y ahora estás viviendo con ellos... - Dijo ella alucinada.
- Bueno y estoy saliendo con Harry. - Añadí nerviosa ya que mi hermana siempre me criticó mucho con respecto a los chicos y a mí me afecta bastante.
- ¿Qué? ¿Espera Harry? Harry Styles? - Dijo ella, que parecía más nerviosa que yo
- Sí.
- Pero si no le conoces, yo de verdad April no te entiendo, cada día te gusta uno diferente.- Dijo con un todo elevado de voz.
- Primero: no me grites, segundo: a mí no me gusta cada día uno diferente y tercero: Sí le conozco.
- Eso es lo que tu crees, dime que conoces de él.
Yo le empecé a contar muchas cosas, como por ejemplo que él tenía una hermana mayor que se llamaba Gemma, la madre Anne, un padre y padrastro. Un gato llamado Dusty. Le conté como era Harry, las cosas que le gustaba hacer...
- ¿No te das cuenta? - Dijo Jane. - Sabes todo eso por internet no porque él te lo haya contado.
- Jane no te llamé para que me critiques, ni para que me grites. Necesito tu opinión.- Dije agobiada.
- Mi opinión es que deberías pararte un poco a conocerle más. Quedar con él más tiempo a solas, hablar de las cosas personales. Dejaros de tanto amor, y tantas sorpresas. Hay que conocer a una persona antes de empezar a tener una relación. Y ahora si me disculpas hermanita, voy a cenar. Un beso, y hazme caso.- Colgó.
[ NARRA PAM]
- Toma.- Dije, entregándole un té a Niall.
- Gracias.- Respondió él, sentándose sobre el respaldo de la cama.
- Sabes que yo no me creí la excusa de la comida, ¿verdad?
- No era una excusa, era la verdad.- Dijo él
- Ya, venga Niall que no soy estúpida. - Respondí un poco enfadada.
- Tengo sueño, gracias por el té, si me disculpas, voy a dormir.
- Como quieras, pero no vas a poder evitarme todos los días, te recuerdo que ahora vivo aquí.- Dije con un tono borde.
- Sí puedo, solo vives aquí por unos días...
Ese comentario me dolío. Apagué la luz y salí de la habitación. Fui a la cocina y vi a April sola.
- ¿Qué te pasa? - Le pregunté.
- ¿Crees que Harry y yo vamos muy rápido?
- No me lo había planteado hasta ahora, pero sí, es posible. Piensa, ¿desde hace cuanto que les conocemos así, personalmente? Tres semanas? Un mes quizás? - Respondí.- ¿ Pero a dónde quieres llegar?
- Hablé con Jane y ella me dijo que...
- No deberías haber hablado con ella April, tu no confías en ti misma y ella tampoco es que te ayude mucho.- La interrumpí.
- Escuchame.. ella me dijo que todo lo que conozco de Harry es porque lo sé por internet, que él y yo no tuvimos conversación "íntimas" por decirlo de alguna manera y, en parte, tiene razón.
- Pero eso lo puedes cambiar, coméntaselo a él, seguro que lo entiende. - Le dije intentando tranquilizarla.- ¿ Por qué aún te gusta verdad?
- Cuando él me besa siento que es de verdad, que significa algo. Luego no me lo puedo sacar de la cabeza. Cuando Harry roza sus labios con los míos empiezo a temblar... Sus besos son cálidos y profundos, tanto que me cortan la respiración. ¿ Responde eso a tu pregunta?.
- Dios... no sabía que sintieras todo eso cuando estás con él. Me haces acordar a mí cuando empecé con Ian. April quiero hablar más de estas cosas contigo, me gusta saber como te sientes con Harry.
- Gracias Pam, por todo. De verdad.- Dijo abrazándome - Y creeme hablaré con él.
Pensé en contarle lo de Niall, a ver si ella sabía algo pero la vi tan mal por lo de Harry que no quería molestar con una tontería mía. April se fue a la cama, yo en cambio, me quedé. No sé que le pasaba a Niall conmigo, no entendía el por qué de su actitud hacía mí. Quizás realmente le había sentado mal la comida aún así a mí había algo que no me cuadraba. Esperaré hasta mañana, es lo que me queda.
[ NARRA APRIL]
Fui a la cama dispuesta a contarle a Harry mi preocupación. Cuando llegué, él ya estaba dormido. Mañana será otro día, pensé. Me metí en la cama, y le abracé. Necesitaba sentirle, sentir que estaba ahí, durmiendo conmigo.
Por la mañana me levanté antes, quería prepararle el desayuno a Harry y llevárselo a la cama. Le hice mi chocolate lo más delicioso posible, y preparé unas magdalenas de vainilla. Fui al patió y arranqué una rosa blanca y se la puse en vaso con agua, encima de la bandeja.
- Oh April, no tenías que hacerlo.- Dijo él en cuanto entré en el cuarto.
Le acerqué la bandeja, él se acomodó para que pudiera apoyarla en sus piernas. Cogió una magdalena, la mojó en el chocolate.
- Mmmm, está riquísimo! - Exclamó.
- Me alegro. - Dije sonriente.- Harry hay una cosa, que quiero hablar contigo...
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